Cultivos Y Productos De Tipo Orgánico
Desde los años noventa, la demanda de productos de tipo orgánico ha aumentado en el mundo entero. De hecho, el mercado de estos productos mueve alrededor de 46 billones de dólares al año y esta cifra va en aumento. Sin embargo, hay que decir que los cultivos orgánicos producen una menor cantidad de cosechas, en comparación con los cultivos de tipo tradicional. No obstante, cuando se trata de cultivos orgánicos se habla de calidad y no de cantidad. Por otra parte, los cultivos orgánicos implican prácticas agrícolas que son amistosas con el medio ambiente, ya que no se usan herbicidas, fungicidas, insecticidas o fertilizante de tipo sintético. Al evitar el uso de estos productos, los cultivos orgánicos son una forma “verde” de producir alimentos.
La agricultura orgánica también está relacionada a la producción de alimentos de tipo animal, no sólo se trata de obtener frutas y verduras, sino también de poder ofrecerle al consumidor todo tipo de productos. Para la obtención de alimentos orgánicos está prohibido el uso de organismos modificados genéticamente, de aditivos, de antibióticos, de hormonas, de reguladores del crecimiento, de pesticidas y de fertilizantes. En vez de estos productos, los granjeros orgánicos acuden a los controles de plagas biológicos, al uso de composta, al abono ecológico y a la rotación de cultivos; con el fin de producir plantas y vegetales que estén libres de químicos que puedan dañar la naturaleza y afectar la salud del consumidor.
Aparte de esto, las estrategias orgánicas de producción de alimentos también tienen otros beneficios, como su contenido nutricional. Estudios han podido avalar que el contenido de vitaminas y minerales de los alimentos orgánicos es muy superior al de los alimentos tradicionales, puesto que provienen de un suelo más rico en nutrientes y más saludable. Por otra parte, cuando se obtienen productos de forma natural, éstos tienen una vida útil superior, ya que su integridad metabólica y estructural, en su composición celular, es superior al de otros alimentos.
Los cultivos orgánicos pueden dividirse en tres categorías: pasturas, cultivos de campo y huertas. Las pasturas son destinadas a proveer una nutrición rica y saludable al ganado y a otros animales, a la vez que se elimina el uso de antibióticos y de hormonas de crecimiento. Los cultivos de campo son grandes sembradíos y requieren el uso de tractor, por lo general en ellos se siembra caña de azúcar, café, té, algodón, legumbres, trigo, maíz y soya. Las huertas también son populares y pueden incluir frutas, vegetales y flores.
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